Desde la Dirección de Gestión del Riesgo se mantiene el monitoreo constante de nuestro principal río con la red de apoyo comunitario. 

La inspección se hizo desde la bocatoma en Calucé. 

No hay reportes de desbordamiento, ni familias afectadas por esta creciente. 

Las lluvias han generado afectación de vías rurales como deslizamientos, pérdida y paso obstruidos. 

Desde la Dirección de Gestión del Riesgo se ha realizado la inspección y seguimiento en diferentes zonas da la ciudad ante las fuertes lluvias generadas en las últimas horas.

En la noche del martes 2 de marzo, el personal de la Dirección de Gestión del Riesgo de Desastres en conjunto con el personal de Bomberos de Palmira, realizó inspección en el río Nima debido a una nueva crecientes.

La inspección se hizo desde la bocatoma en Calucé, pasando por Potrerillo, el sector de río Nima en Tienda nueva, Calamar en Boyacá y Barrio Azul en Amaime.

Según el director de Gestión del Riesgo, Camilo Saavedra, “no hay reportes de desbordamiento, ni familias afectadas por esta creciente, ya que en horas de la madrugada cesaron las lluvias intensas en la parte alta de la cuenca, y el caudal del río, que empezó a descender lentamente”.

Por otro lado, las lluvias han generado afectación de vías rurales como deslizamientos, pérdida y socavación de taludes y paso obstruidos, que están siendo atendidos por el grupo operativo de la Secretaría de Infraestructura; entre los puntos identificados están: la vía principal del Corregimiento de Tenjo, en el Corregimiento de Ayacucho, las vías que conducen a las veredas Iracales, el Mesón, Gualanday y Arenillo parte alta y la vía a la Nevera desde La Quisquina.

“Desde la Dirección de Gestión del riesgo seguiremos haciendo un monitoreo constante según las condiciones climáticas y sus consecuencias en el municipio”; señaló Camilo Saavedra, director de Gestión del Riesgo.