La secretaria Claudia Buitrago aceptó la invitación de los habitantes de La Buitrera, donde tuvo la oportunidad de conocer sus necesidades y tres experiencias agro en las cuales trabajan algunas familias. La primera experiencia fue en el sector de Aguacatal. Allí conoció un proyecto de cultivo de orellanas, unos hongos altamente nutritivos y a los que se les reconoce cualidades medicinales.

A través de su producción, Jairo Gonzáles y su familia generan empleo en su comercialización. Cabe destacar que después de las setas chinas y los champiñones, las orellanas son los tipos de hongos más vendidos del mundo.

Luego conoció la experiencia de Natividad, quien hace parte de Asochonta, una organización campesina dedicada a la producción de huevos. Finalmente estuvo en Arenillo, donde encontró varias economías familiares que se basan en la producción y comercialización de la trucha in situ. Gracias a ese tipo de emprendimientos, varias pequeñas áreas han sido acondicionadas para ofrecer los servicios de pesca, restaurante y senderismo.

“En el recorrido guiado por la comunidad logramos verificar en terreno una de las problemáticas del sector rural de Palmira que está relacionada con la tenencia de tierras, y es que existen numerosos predios baldíos en extinción de dominio, con falsa tradición, ocupados por campesinos que se dedican a la producción agropecuaria pero que no pueden acceder a créditos ni a la mayoría de beneficios estatales por no tener un título de propiedad de la tierra que vienen trabajando desde hace años”, concluyó Claudia Buitrago.

La Secretaría Agropecuaria y de Desarrollo Rural trabajará para que cada una de estas iniciativas económicas se conviertan en propuestas sostenibles.